El subidón del precio de la luz amenaza la venta de eléctricos: cargar un coche cuesta un 140% más
El subidón del precio de la luz ha disparado la falta de confianza de los consumidores a la hora de comprar un coche eléctrico, ya que cargar la batería cuesta 140% más que hace un año. Esto sumado al elevado coste de los vehículos y la baja infraestructura de recarga en las carretera podría provocar una caída de las ventas de vehículos en los próximos meses, pese a las ayudas que ha puesto en marcha el Gobierno para incentivar la compra de este tipo de vehículos.
Así lo han señalado fuentes del sector en conversaciones con OKDIARIO que han explicado que el alza del precio de la luz en el mercado mayorista ha afectado negativamente a los coches eléctricos, aunque circular con este tipo de vehículo sigue siendo más barato que hacerlo con uno de diésel o gasolina. «El alza de la luz, el elevado precio de los coches pese a las ayudas del Gobierno y la falta de infraestructuras en las carreteras españolas están disparando la falta de confianza de los consumidores españoles a la hora de decantarse por la compra de un ‘cero emisiones’, a lo que hay que sumar los efectos colaterales de la crisis del coronavirus en el mercado», aseguran
Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), durante el año pasado el coste anual en electricidad que suponía la carga de un vehículo eléctrico en horario valle -esto es entre las 00:00 y las 06:00 horas- ascendía a 190 euros. Sin embargo, con la actual subida de los costes de la electricidad en el mercado mayorista, el precio ya roza los 450 euros, lo que se traduce en un 140% más.
No obstante, desde la OCU, defienden que el automóvil eléctrico sigue siendo más económico que un coche similar con un motor de gasolina. Explican que es 7.500 euros más barato, especialmente ahora que en los últimos 12 meses el precio de la gasolina se ha encarecido un 22%. Además, calculan que la amortización del coche eléctrico, teniendo en cuenta el descuento de 4.500 euros del Plan Moves III, se alarga de dos años y medio a cuatro años, añadiendo un año y medio más con esta nueva subida de los costes de la electricidad.
Al mismo tiempo, desde la organización se ha observado una subida en los precios en la red Ionity de carga rápida en carretera. Lo que en marzo costaba 0,790 euros/kWh, en septiembre ha pasado a los 0,825 euros/kWh. Esto ha supuesto que el precio pase a ser ahora tres veces superior a la tarifa valle. A pesar de eso, la red Easy Charger y la de Iberdrola mantienen el precio de la luz para cargar eléctricos.
Un Gobierno que odia los coches
Mientras los españoles ponen en duda la compra de eléctricos, el Gobierno apuesta por eliminar de las ciudades los coches y destinará 2.184,6 millones de euros en 2022 a un conjunto de medidas dirigidas a una menor utilización del vehículo privado en los entornos urbanos o metropolitanos.
Con esa partida quiere poner en marcha un «Plan de choque de movilidad sostenible, segura y conectada en entornos urbanos y metropolitanos», según el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, que se ha entregado hoy en el Congreso de los Diputados.
Esos 2.148,6 millones de euros se desglosarán en tres actuaciones principales: más de 1.124 millones para la implantación de zonas de bajas emisiones en los municipios de más de 50.000 habitantes, 445 millones para electromovilidad y más de 615 millones en mejora de la calidad y la fiabilidad del servicio de Cercanías.